¿Existe el sexo más allá de la penetración? Hay mucha gente a las que le resulta imposible el sexo sin penetración, incluso quien piensa que si no ha habido penetración no ha habido sexo, pues no, déjame decirte que el sexo sin penetración también es sexo.
Deberíamos empezar por analizar ¿Qué es el sexo para ti? Qué entiendes por tener sexo? No, no te quedes pensando en el coito y/o en la penetración, el sexo va mucho más allá.
El coitocentrismo
Sabemos que esto sucede, que algunas personas piensan en que el fin siempre es que exista penetración, lo sabemos porque nos encontramos con muchas personas insatisfechas porque no pueden ofrecer la penetración a su pareja, ya sea por disfunción, por falta de erección o incluso lo hemos visto por el tamaño del pene (otro error pensar que un pene de menos tamaño no va a dar placer). En su gran mayoría son hombres que hacen un uso habitual de arneses sexuales o fundas para penes por no poder ofrecer una penetración con su pene, ok, eso está bien, es perfecto si ambos miembros de la pareja lo quieren así, pero, el sexo es mucho más, desde una caricia, un beso, unas palabras picantes, un masaje que acaba en sexo oral y mucho más que podéis experimentar.
Si quieres olvidarte un poco del coitocentrismo y desprenderte un poco de esa obsesión por penetrar, te invitamos a que pruebes a practicar algunas de estas cosas:
“En un solo centímetro de piel hay más de 5.000 receptores sensitivos”
Masajes a flor de piel
¿Quién le dice que no a un buen masaje? Los masajes tienen muchos beneficios en la relación de pareja. Ofrecen un momento de intimidad donde el que habla es uno de los órganos más grandes del cuerpo, la conexión entre nuestro interior y el exterior, la piel.
La piel está en permanente relación con nuestros órganos internos, es a través de ella que nuestro cuerpo revela nuestro malestar o nuestro bienestar.
Sentimos y revelamos nuestras emociones a través de la piel, estímulos como “piel de gallina”, la piel se sonroja cuando sentimos vergüenza, transpiramos cuando estamos nerviosos…La piel nos puede dar mucha información de nuestra pareja.
En un solo centímetro cuadrado de piel hay más de 5.000 receptores sensitivos que envían información instantáneamente al cerebro, quien le dice cómo actuar en base al estímulo.
A través de los masajes se crea un momento íntimo con tu pareja, donde puedes dedicarte a sentir la piel del otro y conocer más profundamente vuestros cuerpos.
Caricias y besos
Parece obvio, los besos y las caricias deben estar presentes durante las relaciones íntimas, pero no siempre se les da la importancia que se merecen.
Los besos y las caricias son un punto clave a la hora de demostrar cariño y afecto, fortalecen el vínculo en la relación además de segregar hormonas como la dopamina.
La dopamina influyen en nuestro estado de ánimo, en nuestro comportamiento, es esencial para regular nuestro metabolismo. Está considerada uno de los neurotransmisores del placer, por lo que es un punto clave para proporcionar placer, sexualidad y deseo.
Sexo oral
Al unir nuestros labios a los de la otra persona liberamos neurotransmisores relacionados con el placer, nuestra boca tiene un poder inimaginable para poder dar placer.
“El 78% de las mujeres disfrutan más del sexo oral que de la penetración”
Con la boca podemos estimular los diferentes sentidos, el tacto, el gusto, el oído, e incluso el olfato y la vista cuando esta parte del cuerpo además de ser agradable a los ojos también sabe rica.
Está demostrado que dar y recibir sexo oral aumenta la felicidad.
Masturbación
Tanto proporcionar placer a través de las manos a tu pareja como a ti mismo/a es altamente recomendado, ya que nos ofrece mucha más información de qué le gusta, cómo le gusta y dónde. Nos sirve para conocer mejor a tu pareja y mejorar la comunicación entre vosotros para saber qué os hace disfrutar más. No te cortes, dile a tu pareja cómo te gusta, lleva su mano directamente dónde te gustaría que te tocará, o ayúdale a llevar el ritmo con tu mano sobre la de él/ella.
Esto ayuda a descubrir lo que nos causa placer y enciende el deseo entre ambos.
Muchas personas siguen confundiendo el sexo con penetración, si durante el acto sexual solo hay penetración te pierdes un montón de cosas interesantes, prácticas que pueden llegar a ser igual de placenteras o más.